Es la mayor prueba de auto-control desde hace meses. Me siento encarcelada entre sentimientos no recíprocos, despertar de un sueño, empezar una pesadilla y no sé como debo tomármelo.. estoy tan preocupada por todo que como menos que antes, ya no soy capaz de decir todo lo que siento, porque tan solo es un sentimiento de angustia. Mis te quiero se esconden entre susurros para que no los oigan, mido mis palabras con regla y el nudo que tengo en la garganta me corta conversaciones constantemente. No poder expresar lo que siento se me hace pesado. Y aun así... aguanto. Porque tengo la esperanza de que solo será una mala pasada.
Y sus miradas.
jueves, 28 de abril de 2011
xoxo, Evita Vilor en 7:50 0 comentarios
What i'm dreaming of.
martes, 26 de abril de 2011
Olvidar lo real para recordar lo ficticio. Mis sueños son idílicos y ya los vivo incluso antes de desmayarme ente las sábanas. Hablando entre rosas es lo único que recuerdo, y lo único que me hizo sentir bien durante horas disfrazadas de segundos. El despertar nunca fue tan confuso para mí; donde antes sueños y realidad fusionaban, ahora permanece una realidad divergida en expectaciones para el futuro. Queda tanto por hacer, y aun tanto por soñar despierto...
Tengo fé en esto.
xoxo, Evita Vilor en 12:38 0 comentarios
Entre dos aguas.
miércoles, 6 de abril de 2011
Los sueños.
Espontáneas imágenes veloces que atraviesan tus noches controlando tu cuerpo y tus sentimientos por un momento. Cortos pero de extraordinaria fuerza. Se apoderan de tu mente como el mayor de los hipnotizadores y juegan con ella cual marioneta, frágil, débil, sin poder oponer la menor resistencia. Pesadilla o no, estamos resignados a soportarlo. ¿No es eso una forma de suplicio?
De cierto modo, tu cabeza actúa como el peor traidor. Perfectamente consciente de tus miedos, te los echa en cara, porque es el dueño de todos tus secretos...
Desde siempre sabía distinguir los sueños de la realidad, la frontera entre ambas era amplia. Saltar de un mundo a otro sin confundirlos ni un segundo era tarea fácil. Sin embargo, la ventaja que tenia sobre ella disminuyó, y me acabó alcanzando, haciéndome caer en locuras, engañándome, haciendo que tenga mis sentimientos a flor de piel... Mis mayores miedos pasaron del lado de mi cama, es más... duermen conmigo todas las noches. Un dulce asesino imaginario con el que convivo perfectamente.
Vulnerables a nosotros mismos.
xoxo, Evita Vilor en 11:50 0 comentarios
Uno, dos, tres...
domingo, 3 de abril de 2011
xoxo, Evita Vilor en 8:03 1 comentarios